Cambio todo. Es mirar fotos, y sentirme rara. Es acordarme de su sonrisa, y sonreir. Es necesitarlo, y no tenerlo. ¿Y como voy a creer en el amor si nunca baje los brazos y lo perdí igual? Prometí, cumplí, la remé, y aca estoy. Extrañando. Siempre juntos.